Le Lagon

Toulon siempre nos encanta con su ambiente de pescador marinero. Es agradable vivir en esta gran ciudad portuaria típica, donde los habitantes viven al ritmo de las mareas. Se siente un bienestar, al igual que esta brisa yodada que nos abraza. Cada día es un descubrimiento en esta ciudad que rebosa maravillas. A lo largo de un litoral arenoso y encantador se encuentra una playa encantadora que da que hablar. Situada en la playa de Mourillon, frente a la rada de las Vignettes, la playa Le Lagon nos atrae por su universo solar y exótico. Descubra un poco más lo que tiene para ofrecerle.

El universo Le Lagon

El ambiente de Le Lagon:

La playa Le Lagon le ofrece el privilegio de apreciar un paisaje paradisíaco en total exclusividad. Su terraza, que domina la bahía, le permite contemplar el horizonte resplandeciente que desfila y se despliega hasta el infinito. Si desea regalarse un momento solo para usted, de pura relajación, ha encontrado la playa adecuada. El marco cautivador le desconectará del resto mientras que el equipo vivaz y entusiasta hará todo lo posible para embellecer su día. Con escucha y amabilidad, responderá a todas sus necesidades y le transmitirá su sonrisa.

Las tumbonas de Le Lagon:

En la playa, la playa de Le Lagon respeta las tradiciones. Tumbonas topo, sombrillas rayadas azul marino y blanco para protegerle del sol caliente. Un espacio íntimo, en esta cala arenosa, para disfrutar plenamente de la laguna. Con total transparencia, podrá bañarse y llenarse de vitamina D, tomar el sol con los pies en la arena suave y masajeante o incluso contemplar este incansable relieve varense mientras saborea un cóctel bien fresco firmado Le Lagon. Al borde del agua, arrullados por la melodía armoniosa de las olas, déjese llevar por esta corriente fresca y yodada.

La decoración de Le Lagon:

Es la madera la que predomina en Le Lagon, y le aporta todo el calor que necesita. A través de una fusión total con los elementos de esta hermosa naturaleza mediterránea, Le Lagon le invita a cuidarse. En una simplicidad muy chic y natural, le acoge bajo las sombrillas de palapa, o las redes de camuflaje de color beige sobre sus cabezas. Los finos rayos de sol que atraviesan aportan una luz tan apaciguadora que se relajará incluso antes de empezar la comida. Plantas para acompañarle, y el mar a su alcance.